La IA en la suscripción del negocio de personas

Equilibrando la Innovación con la Experiencia Humana


Por: Carlos Rodríguez
L&H Chief Transformation and Digital Officer, UW & Claims for Latin America and Southern Europe

A medida que las empresas buscan la transición a flujos de trabajo cada vez más digitales, desplazando tareas rutinarias que antes realizaban empleados a sistemas de nueva generación, el papel de la suscripción también cambia. (De hecho, es el área que las aseguradoras consideran más afectada por las nuevas tecnologías.)

En el panorama de seguros en constante evolución, donde la digitalización y la IA están adquiriendo cada vez más prominencia, el papel de la suscripción está experimentando un cambio transformador. Las aseguradoras buscan constantemente formas de mejorar la eficiencia, la precisión y la satisfacción del cliente, y la integración de la inteligencia artificial (IA) se percibe como un facilitador clave para lograr estos objetivos.

Las aseguradoras ya están experimentando activamente con modelos de IA generativa. La IA generativa representa una frontera en la inteligencia artificial, permitiendo a las máquinas generar contenido novedoso, como imágenes, texto o incluso escenarios completos, basados en datos de entrada. En el contexto de la suscripción, la IA generativa tiene un inmenso potencial para automatizar tareas repetitivas, mejorar la evaluación de riesgos y agilizar los procesos de toma de decisiones. Al aprovechar los modelos de IA generativa, las aseguradoras pueden obtener insights más profundos sobre factores de riesgo complejos, generar predicciones más precisas y, en última instancia, mejorar los resultados de la suscripción.

Sin embargo, la adopción de la IA generativa en la suscripción no está exenta de desafíos. Las aseguradoras deben navegar por consideraciones éticas, garantizar la privacidad y seguridad de los datos y abordar posibles sesgos inherentes en los algoritmos de IA. Además, la naturaleza compleja de los riesgos de seguros demanda un enfoque matizado para la implementación de la IA, donde la supervisión humana sigue siendo indispensable.

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